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¿Es Bueno o Malo comer Huevo?

Publicado el : 08/10/2018
Categorías : Empanadas Rss feed

Un alimento con mucha controversia sobre su redondeada cáscara es el huevo: en diferentes momentos de la historia, se le ha acusado de ser perjudicial para la salud y se le ha coronado como a uno de los reyes de los productos beneficiosos, ¿a qué tipo de opinión debemos hacerle caso? ¡Quedaos a leer nuestro artículo y tomad la decisión de repudiar al huevo o de abrazarlo como un obligatorio en vuestra dieta de una vez por todas!

Para empezar, debemos saber que el huevo contiene proteínas de alto valor biológico —que se aprovechan completamente si lo cocinamos—, así como un gran número de vitaminas, como la A, la D, la E, la K o la B12. Gran parte de su composición es agua, pero también tiene lípidos destinados a alimentar al futuro polluelo y minerales como el fósforo, el zinc, el hierro o el yodo. Por otro lado, la cantidad de hidratos de carbono que tiene es bastante baja y, más aún, en comparación con el resto de nutrientes.

Ahora bien, ¿estos nutrientes en qué se traducen? ¿En qué afectan a nuestros cuerpos? Para empezar, está muy extendido el mito acerca del elevado colesterol que se esconde tras las propiedades del huevo. Así es, es un mito y no hay necesidad de quitar la yema del huevo, sino más bien todo lo contrario: debe ir junto con la clara para que se puedan aprovechar todos sus nutrientes, aunque sí que recomendamos su consumo moderado, como en cualquier otro alimento, especialmente en personas con problemas de hígado graso y renales.

Con respecto a lo que el huevo puede aportarnos, hay que destacar sus propiedades dietéticas, al igual que la ayuda que nos presta para bajar la tensión y para aumentar el músculo, gracias a las proteínas de las que hablábamos antes. También es un gran aliado en el desarrollo cerebral y de la vista, ayudando incluso a prevenir enfermedades de la misma. No olvidemos lo completo que es este producto; quitarlo de nuestra dieta nos supone perder grandes oportunidades de mantenernos sanos.

Por supuesto, la forma de preparar este alimento de origen animal también importa, y mucho. No es lo mismo crudo o frito —lo cual desaconsejamos— que cocido. Siempre bajo la consulta previa de un médico, se recomienda comer huevos varias veces por semana y en esta última forma para aprovechar cada gramo de nutriente. La buena noticia es que es muy versátil y combina a la perfección con muchos platos: ¡no te cansarás de él!

¿Conocíais estas propiedades? ¿Erais de los que no lo consumían por miedo a que subiera el colesterol o de los que se atiborraban por sus valores nutritivos?

Por cierto, ¿sabéis qué ingrediente básico llevan nuestras empanadas? Así es: huevo. ¿A qué esperas para pedir tu ración semanal de este gran alimento?

 

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