Nochebuena, ¿y yo qué cocino ahora?

¡Felices fiestas a todos y todas! Ya están aquí esas hermosas fechas de celebraciones en familia, alegría, risas…y “últimas horas”, ¿verdad?

Te entendemos. Todos los años llegan de improviso las Navidades, pasando los días de Halloween a Nochebuena como una exhalación.

En el grupo de Whatsapp familiar has leído cómo todos los demás ya han empezado a organizar en qué coches van a ir y qué platos va a llevar cada uno para la cena, con sus correspondientes sobras para la comida del día siguiente.

Alguien tiene listo ya el champán y el jamón de la cesta de Navidad de su empresa; otra persona va a traer el turrón y los polvorones; un tercero se ha armado de valor y va a traer cordero; un número que no tienes guardado—una cuñada nueva— dice que va a traer el marisco; y una última persona se ha puesto creativa y ha cocinado algún que otro aperitivo exótico e innovador. ¿Tú qué tienes pensado?

Se acerca Nochebuena y se te acaban las opciones. Claro que tampoco has tenido mucho tiempo entre la casa, el trabajo y los niños… te entendemos perfectamente. Por eso mismo, vamos a sugerirte algunas ideas que dejarán los paladares de todos danzando en un paraíso de texturas y sabores auténticos y caseros. Y no tendrás que ocupar tu tiempo en ir a comprar los ingredientes, cocinar y repetir porque has seguido una receta que, a todas luces, estaba mal y te ha quemado el guiso, la olla y hasta la vitrocerámica.

A modo de aperitivo, acompañando al jamón, al queso y al hummus, proponemos un surtido de saladitos para todos los gustos: de sobrasada, de jamón, de atún, de queso… ¡Prepárate para que no se dejen ni uno en la bandeja!

Tras el coloquio en torno a la mesa, llegan los entrantes. ¿Qué te parecen un par de empanadas que no dejarán a nadie sin catarlas? La empanada de carne saciará los estómagos más fuertes; la de bonito del norte, a los fanáticos del mar; una empanada de espinacas y Philadelphia acallará el hambre de los vegetarianos; y una novedosa empanada de mejillones sorprenderá a todos los comensales. ¡Como ves, hay empanadas de pan y de hojaldre para todos los gustos!

Con toda la familia desabrochándose el cinturón y alegando que no pueden más, llega el postre— y es que siempre hay sitio para un dulce bocado—. Apostamos algo a que esas tripas rebosantes de comida agradecerán un pedacito ligero de tarta tropical de crema y frutas o un buen trozo de tarta de nata con almendras, para quien haya quedado con hambre.

Contempla a todos tus seres queridos dichosos y reposando la cena en el sofá. Abre los oídos para recibir los halagos por la cena que has llevado. Sabemos que lo has hecho porque te gusta verles saciados y felices… pero nunca viene de más que se aprecien estos gestos.

Claro que, también es posible que decidas guardarte este comodín para la comida de Navidad o para Nochevieja— que igual con los nervios de las últimas horas del año prefieres no arriesgarte a chafar un plato y dejar a tus invitados sin nada que llevarse a la boca salvo las uvas—. En cualquier caso, estaremos encantados de saber en qué momento prefieres sacar a relucir estas ideas. ¿Qué otro menú se te ocurre a ti? ¿Con qué vas a sorprender a tu familia en estas fechas?

¡Esperamos que nuestras sugerencias te sean de ayuda y que pases una Feliz Navidad!